17 de diciembre de 2013

Jack the Lad Swing

This is the official web where you can have all the information that you need from the boy-band JLS.
www.jlsofficial.com

Here are some videos:

-Eyes Wide Shut > Eyes Wide Shut
-Take a Chance On Me > Take a Chance On Me
-Hold Me Down (Acoustic Version) > Hold Me Down
-Do You Feel What I Feel > Do You Feel What I Feel?
-Proud > Proud
-Billion Lights > Billion Lights
-Never Gonna Stop > Never Gonna Stop

Enjoy it!


16 de diciembre de 2013

Canción de Kabir

¡Oh ligero era el mundo que llevaba en sus manos!
¡Pesada la layenda de sus tierras y honor!
Ha abandonado el guddee y, poniéndose el manto,
en traje de bairagi se ha ido sin pudor.

Ahora el camino blanco de Delhi es su felpudo.
El sal y el kikar le guardarán del sol.
Su hogar es una tienda, los yermos y las gentes.
¡La senda del bairagi rastrea sin pudor!

Ha contemplado al hombre: sus ojos están limpios.
(Hubo y hay solo -dijo Kabir-, no dos).
De Doing la Roja Niebla se ha convertido en nube.
¡La senda del bairagi elige sin pudor!


RUDYARD KIPLING, Los libros de la selva

A Divine Image

Cruelty has a human heart,
and jealously a human face;
Terror the human form divine,
and the Secresy the human dress.

The human dress is forged iron,
the human form a fiery forge.
The human face a furnace sealed,
the human heart its hungry gorge.


WILLIAM BLAKE, A Divine Image

Las ventajas de ser un marginado (The Perks of being a Wallflower)

I think this movie really touched me. It's amazing, you should see it.
Here is the trailer of the movie and some pictures of it.
Enjoy it!

http://www.youtube.com/watch?v=n5rh7O4IDc0




15 de diciembre de 2013

La noche en que supimos que la tierra
se iba a mover, de allí nos lo llevamos;
el amor que sentíamos por él
nos hacía saber sin percatarnos.

Cuando se abrió, rugiente, la montaña
y nuestro mundo se deshizo en lluvia,
nosotros, Pueblo Chico, le salvamos,
pero, mirad, ¡no ha regresado nunca!

Llorad, pues le salvamos por amor,
un pobre amor de criatura humilde.
Nuestro hermano, ¡oh dolor!, no volverá.
¡Y ahora los de su raza nos persiguen!


ENDECHA DE LOS LANGARES

La ley de la selva

Ved aquí nuestra ley, la de la selva,
una ley tan antigua como el cielo.
Prosperará aquel lobo que la cumpla;
si no, rodará muerto por el suelo.

Como la enredadera abraza el tronco,
la ley, en su vaivén, va y viene y va.
Pues el lobo da fuerza a la manada,
y la manada al lobo fuerza da.

Cada día lavaos de cabo a rabo.
Bebed, mas sin exceso, no a lo loco;
no olvidéis que se caza por la noche,
pues el día hay que dárselo al reposo.

Quizá el chacal vaya detrás del tigre;
el lobo en cambio caza de por vida:
cachorro, en cuento os crezcan los bigotes,
salid a conseguir vuestra comida.

Vivid con los señores de la selva
en paz: el tigre, la pantera, el oso;
y no os burléis del jabalí en su cueva
ni molestéis a Hathi el Silencioso.

Cuando en la selva topen dos manadas
y ninguna quiera soltar el rastro,
esperad hasta que hablen ambos jefes,
y en justicia quizá arreglen el caso.

Si tenéis que luchar con otro lobo,
hacedlo solo y a distancia digna,
para evitar que, si interviene alguno,
la manada se vea reducida.

Es la cueva del lobo su refugio,
pero, si alguno lo ha elegido mal,
el consejo le enviarán un aviso
y deberá cambiarla de lugar.

Si a cazar vais antes de medianoche,
no despertéis los bosques con aullidos,
no se que, espantándose los ciervos,
los hermanos se vayan de vacío.

Podéis matar para vuestras parejas,
para vosotros y vuestros cachorros.
Mas no temáis jamás por puro gusto
y no matéis al hombre sobre todo.

Si le robáis la caza a alguien más débil,
no devoréis jamás toda la presa.
Los inferiores tienen su derecho:
dejadle, pues, la piel y la cabeza.

La caza de la manada es de todos:
comedla en el lugar donde se encuentre.
Nadie podrá llevársela a su cueva,
de lo contrario encontrará la muerte.

Mas la caza del lobo es carne suya
y puede hacer con ella lo que quiera.
Pero, si el lobo no ha dado permiso,
la manada no puede comer de ella.

El cachorro también tiene derechos.
Puede pedir comida de su manada,
siempre que el cazador ya haya comido;
nadie puede negarle su pitanza.

El derecho de cría es de la madre,
y puede pedir para su camada
una pierna de cada presa muerta;
nadie puede negarle su pitanza.

El derecho de la cueva es del padre;
para los suyos puede cazar a solas.
Queda exento de atender a la manada:
solo el consejo puede juzgar sus obras.

Por su edad, por su astucia y por su garra,
por su fuerza en cazar y acometer,
la palabra del jefe de los lobos
es ley en lo que no ataña a la ley.

Estas leyes, muchas y poderosas,
son las fundamentales de la selva.
Mas su cabeza y garra, su pata y su joroba
solo consiste en una: ¡Obedecerlas!


RUDYARD KIPLING, El libro de la selva

8 de diciembre de 2013

Invierno (Fe de vida)

Sé que el invierno está aquí,
detrás de esa puerta. Sé que si ahora saliese fuera
lo hallaría todo muerto,
luchando por renacer.
Sé que si busco una rama
no la encontraré.
Sé que si busco una mano
que me sale del olvido
no la encontraré.
Sé que si busco al que fui
no lo encontraré.

Pero estoy aquí. Me muevo,
vivo. [...]
Alegría. (Alegría
que está caída a mis pies).
Nada en orden. Todo roto,
a punto de ya no ser.

Pero toca la alegría,
porque aunque todo esté muerto
yo aún estoy vivo y lo sé.

Otoño

Otoño de manos de oro.
Ceniza de oro tus manos dejaron caer al camino.
Ya vuelves a andar por los viejos paisajes desiertos.
Ceñido tu cuerpo por todos los vientos de todos los siglos...

    Otoño, de manos de oro:
con el canto del mar retumbando en tu pecho infinito,
sin espigas ni espinas que pueden herir la mañana,
con el alba que moja su cielo en las flores del vino,
para dar alegría al que sabe que vive
de nuevo has venido.
Con el humo y el viento y el canto y la ola temblando
en tu gran corazón encendido.

Verano

Caído mi cuerpo,
verano, a tu lomo,
llueven a mi carne
flechas de oro,
músicas calientes,
vinos rojos,
ritmos desbordados
de tu oscuro fondo.
(Pegados a la tierra yo los oigo).

¡Oh, cantar, cantarte,
comprenderlo todo,
ir a todo, ser
materia de todo,
saber para siempre
que aunque yo esté solo,
solo con la vida,
nunca estaré solo!

Primavera

Si ahora vinieras con tus flautas,
con tus rebaños de aguas grises,
si tuvieras figura humana,
brazos duros para dormirme,
y no estas flores amarillas
que sólo dejan presentirte,
y no esta brisa que nos roza
como unos dedos invisibles,
y no esta luz, que no sabemos
si es que te quejas o te ríes...

Si me llamaras a tu lado,
todo: las horas vagas, tristes,
la soñolienta calma, todo
lo dejaría por seguirte;
si ahora volvieras, primavera,
si te me hicieras hoy visible,
si a mí llegaras de muy lejos
entre unos álamos flexibles...

28 de noviembre de 2013

Árbol de canción

Caña de voz y gesto,
una vez y otra vez
tiembla sin esperanza
en el aire de ayer.

La niña suspirando
lo quería coger;
pero llegaba siempre
un minuto después.

¡Ay sol! ¡Ay luna, luna!
Un minuto cómo se mece
una vez y otra vez,
virgen de flor y rama,
en el aire de ayer


FEDERICO GARCÍA LORCA, Árbol de canción

22 de noviembre de 2013

Milagros de Nuestra Señora

Amigos e vassallos de Dios omnipotent,
si vos me escuchássedes por vuestro consiment,
querríavos contar un buen aveniment:
terrédeslo en cabo por bueno verament.

Yo maestro Gonçalvo de Verceo nomnado,
yendo en romería caeçí en un prado,
verde e bien sençido, de flores bien poblado,
logar cobdiçiaduero pora omne cansado.

Davan olor sovejo las flores bien olientes,
refrescavan en omne las [carnes] e las mientes;
manavan cada canto fuentes claras corrientes,
en verano bien frías, en ivierno calientes.

Avién y grand abondo de buenas arboledas,
milgranos e figueras, peros e mazanedas,
e muchas otras fructas de diversas monedas,
mas non avié ningunas podridas [nin] azedas.

La verdura del prado, la olor de las flores,
las sombras de los árbores de temprados savores,
resfrescáronme todo e perdí los sudores:
podrié vevir el omne con aquellos olores.

Nunqua trobé en sieglo logar tan deleitoso,
nin sombra tan temprada [nin] olor tan sabroso;
descargué mi ropiella por yazer más viçioso,
poséme a la sombra de un árbor fermoso.

Yaziendo a la sombra perdí todos cuidados,
odí sonos de aves, dulces e modulados:
nunqua udieron omnes órganos más temprados,
nin que formar pudiessen sones más acordados.

Unas tenién la quinta, e las otras doblavan,
otras tenién el punto, errar no las dexavan:
al posar [e] al mover, todas se esperavan,
aves torpes nin roncas non se acostavan.

Non serié organista nin serié vïolero,
nin giga nin salterio nin mano de rotero,
nin estrument nin lengua nin tan claro vocero
cuyo canto valiesse con esto un dinero.

Peroque [nos] dissiemos todas estas bondades,
non contamos las diezmas, esto bien lo creades:
que avié de noblezas tantas diversidades
que no las contarien priores [nin] abbades.

El prado que vos digo avié otra bondat:
por calor nin por frío non perdié su beltat,
siempre estava verde en su entegredat,
non [perdié] la verdura por nulla tempestat.

Manamano que fui en tierra acostado,
de todo el lazerio fui luego folgado;
oblidé toda cuita [e] lazerio passado:
¡Qui allí se morasse serié bienventurado!

Los omnes e las aves, quantos acaecién,
levavan de las flores quantas levar querién,
mas mengua en el prado ninguna non façién:
por una que levavan tres e quatro nacién.

Semeja esti prado egual de Paraíso,
en qui Dios tan grand graçia, tan grand bendiçión miso;
él que crió tal cosa maestro fue anviso:
omne que ý morasse nunqua perdrié el viso.

El fructo de los árbores era dulz e sabrido,
si don Adám oviesse de tal fructo comido,
de tan mala manera non serié decibido,
ni tornárién tal danno Eva [nin] so marido.

Sennores e amigos, lo que dicho avemos
palavra es oscura, esponerla queremos:
tolgamos la corteza, al meollo entremos,
prendamos lo de dentro, lo de fuera dessemos.

Todos quantos vevimos, que en piedes andamos,
siquiere en [presión] o en lecho yagamos,
todos somos romeos que camino [pasamos],
San Peidro lo diz esto, por él vos lo provamos.

Quanto aquí vivimos en ageno moramos;
la ficança durable suso la esperamos;
la nuestra romería estonz la acabamos,
quando a Paraíso las álmas envïamos.

En esta romería avemos un buen prado
en qui trova repaire tot romeo cansado:
la Virgin Glorïosa, madre del buen Criado,
del qual otro ninguno egual non fue trobado.

Esti prado fue siempre verde en onestat,
ca nunca ovo mácula la su virginidat,
post partum et in partu fue virgin de verdat,
illesa, incorrupta en su entegredat.

Las quatro fuentes claras que del prado manavan,
los quatro evangelios, esso significavan,
ca los evangelistas quatro que los dictavan,
quando los escrivién, con ella se fablavan.

Quanto escrivién ellos, ella lo emendava,
esso era bien firme lo que ella laudava;
parece que el riego todo d'ella manava
quando a menos d'ella nada non se guiava.

La sombra de los árbores, buena, dulz e sanía,
en qui ave repaire toda la romería,
sí son las oraciones que faz Santa María
que por los peccadores ruega noch e día.

Quantos que son en mundo, justos e peccadores,
coronados e legos, reys e emperadores,
allí corremos todos, vassallos e sennores,
todos a la su sombra imos coger las flores.

Los árbores que facen sombra dulz e donosa
son los santos miraclos que faz la Glorïosa,
ca son mucho más dulzes que azúcar sabrosa,
la que dan al enfermo en la cuita raviosa.

Las aves que organan entre essos fructales,
que han las dulzes vozes, dizen cantos leales,
estos son Agustino, Gregorio, otros tales,
[quantosl que escrivieron los sos fechos reales.

Estos avién con ella amor e atenencia,
en laudar los sos fechos metién toda femencia;
todos fablavan d'ella, cascuno su sentencia,
pero tenién por todo todos una creencia.

El rosennor que canta por fin maestría,
siquiere la calandria que faz grand melodía,
mucho cantó mejor el barón Isaía
e los otros prophetas, onrrada compannía.

Cantaron los apóstolos muedo muy natural,
confessores e mártires [facién otro] tal;
las vírgenes siguieron la gran Madre caudal,
cantan delante d'ella canto bien festival.

Por todas las eglesias, esto es cada día,
cantan laudes ant ella toda la clerecía:
todos li façen cort a la Virgo María;
estos son rossennoles de gran placentería.

Tornemos ennas flores que componen el prado,
que lo façen fermoso, apuesto e temprado;
las flores son los nomnes que lida el dictado
a la Virgo María, madre del buen Criado.

La benedicta Virgen es estrella clamada,
estrella de los mares, guïona deseada,
es de los marineros en las cuitas guardada,
ca quando éssa veden es la nave guiada.

Es clamada, y éslo de los cielos, reína,
tiemplo de jesu Christo, estrella matutina,
sennora natural, pïadosa vezina,
de cuerpos e de almas salud e medicina.

Ella es vellocino que fue de Gedeón,
en qui vino la pluvia, una grand vissïón;
ella es dicha fonda de David el varón
con la qual confondió al gigant tan fellón.

Ella es dicha fuent de qui todos bevemos,
ella nos dio el cevo de qui todos comemos;
ella es dicha puerto a qui todos corremos,
e puerta por la qual entrada atendemos.

Ella es dicha puerta en sí bien encerrada,
pora nos es abierta pora darnos la entrada;
ella es la palomba de fiel bien esmerada,
en qui non cae ira, siempre está pagada.

Ella con grand derecho es clamada Sïón,
ca es nuestra talaya, nuestra defensïón:
ella es dicha trono del reï Salomón,
reï de grand justicia, sabio por mirazón.

Non es nomne ninguno que bien derecho venga
que en alguna guisa a ella non avenga;
non ha tal que raíz en ella no la tenga,
nin Sancho nin Domingo, nin Sancha nin Domenga.

Es dicha vid, es uva, almendra, malgranada,
que de granos de graçia está toda calcada,
oliva, cedro, bálssamo, palma bien ajumada,
piértega en que sovo la serpiente alzada.

El fust que Moïsés enna mano portava
que confondió los sabios que Faraón preciava,
el que abrió los mares e depués los cerrava,
si non a la Gloriosa ál non significava.

Si metiéremos mientes en ell otro bastón
que partió la contienda que fue por Aarón,
ál non significava, como diz la lectión,
si non a la Gloriosa, esto bien con razón.

Sennores e amigos, en vano contendemos,
entramos en grand pozo, fondo no'l trovaremos;
más serién los sus nomnes que nos d'ella leemos
que las flores del campo, del más grand que savemos.

Desuso lo dissiemos que eran los fructales
en qui facién las aves los cantos generales,
los sus sanctos miraclos, grandes e principales,
los quales organamos ennas fiestas caubdales.

Quiero dexar con tanto las aves cantadores,
las sombras e las aguas, las devantdichas flores;
quiero d'estos fructales tan plenos de dulzores
fer unos pocos viessos, amigos e sennores.

Quiero en estos árbores un ratiello sobir
e de los sos miraclos algunos escrivir;
la Gloriosa me guíe que lo pueda complir,
ca yo non me trevría en ello a venir.

Terrélo por miráculo que lo faz la Gloriosa
si guiarme quisiere a mí en esta cosa;
Madre, plena de gracia, reína poderosa,
tú me guía en ello, ca eres pïadosa.


GONZALO DE BERCEO, Milagros de Nuestra Señora (Introducción)

A una nariz

Érase un hombre a una nariz pegado,
érase una nariz superlativa,
érase una nariz sayón y escriba,
érase un pez espada muy barbado.

Érase un reloj de sol mal encarado,
érase un alquitara pensativa,
érase un elefante boca arriba,
era Ovidio Nasón más narizado.

Érase un espolón de una galera,
érase una pirámide de Egipto,
las doce tribus de narices era.

Érase un naricísimo infinito,
muchísima nariz, nariz tan fiera,
que en la cara de Anás fuera delito.


FRANCISCO DE QUEVEDO, Soneto a Luis de Góngora

Soneto I

Cuando me paro a contemplar mi estado
y a ver los pasos por dó me ha traído,
hallo, según por do anduve perdido,
que a mayor mal pudiera haber llegado;

mas cuando del camino estoy olvidado,
a tanto mal no sé por dó he venido:
sé que me acabo, y mas he yo sentido
ver acabar conmigo mi cuidado.

Yo acabaré, que me entregué sin arte
a quien sabrá perderme y acabarme,
si quisiere, y aun sabrá querello:

que pues mi voluntad puede matarme,
la suya, que no es tanto mi parte,
pudiendo, ¿qué hará sino hacello?


GARCILASO DE LA VEGA, Soneto nº 1

He andado muchos caminos

He andado muchos caminos,
he abierto muchas veredas,
he navegado cien mares
y atracado en cien riberas.

En todas partes he visto
caravanas de tristeza,
soberbios y melancólicos
borrachos de sombra negra,

y de pedantones al paño
que miran, callan, piensan
que saben, porque no beben
el vino de las tabernas.

Mala gente que camina
y va apestando la tierra...

Y en todas partes he visto
gentes que danzan o juegan
cuando pueden, y laboran
sus cuatro palmos de tierra.

Nunca, si llegan a un sitio,
preguntan adónde llegan.
Cuando caminan, cabalgan
a lomos de mula vieja,

y no conocen la prisa
ni aun en los días de fiesta.
Donde hay vino, beben vino;
donde no hay vino, agua fresca

Son buenas gentes que viven,
laboran, pasan y sueñan,
y en un día como tantos
descansan bajo la tierra.


ANTONIO MACHADO, He andando muchos caminos

20 de noviembre de 2013

Va, pensiero

Va, pensiero, sull'ali dorate;
va, ti posa sui clivi, sui colli,
ove olezzano tepide e molli
l'aure dolci del suolo natal!
Del Giordano le rive saluta.
Di Sionne le torri atterrate...
Oh, mia patria si bella e perduta!
Oh, membranza si cara e fatal!
Arpa d'or dei fatidici vati,
perché muta dal salice pendi?
Le memorie nel petto raccendi,
ci falleva del templo che fu!
O simile di Solima ai fati
traggi un suono di crudo lamento,
o t'ispiri il Signore un concento
che ne infonda al patire virtú!


¡Pensamiento, vuela con alas doradas,
pósate en las praderas, en las cimas
en donde exhala su fragancia suave
al aire dulce de la tierra natal!
¡Saluda las orillas del Jordán
y las destruidas ottres de Sión!
¡Ay, mi patria, tan bella y perdida!
¡Ay, recuerdo tan grato y fatal!
Arpa de oro de los fatídicos vates,
¿por qué cuelgas en silencio en los sauces?
Reanima en nuestros pechos los recuerdos,
háblanos del tiempo que fue.
Canta un aire de crudo lamento
al destino de Jerusalén,
o que el Señor te inspire un motivo
que infunda la fortaleza al sufrir.


GIUSEPPE VERDI, Nabucco

Mi vida es un erial

Mi vida es un erial,
flor que toco se deshoja;
que en mi camino fatal
alguien va sembrando el mal
para que yo lo recoja.


GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER, Rima LX

Porque son, niña, tus ojos

Porque son, niña, tus ojos
verdes como el mar, te quejas;
verdes los tiene las náyades,
verdes los tuvo Minerva,
y verdes son las pupilas
de las hourís del Profeta.

El verde es gala y ornato
del bosque en la primavera;
entre sus siete colores
brillante el Iris lo ostenta
las esmeraldas son verdes;
verde el color del que espera,
y las ondas del océano
y el laurel de los poetas.

En tu mejilla temprana
rosa de escarcha cubierta,
en que el carmín de los pétalos
se ve al través de las perlas.

Y sin embargo,
sé que te quejas
porque tus ojos
crees que la afean,
pues no lo creas.

Que parecen tus pupilas
húmedas, verdes e inquietas,
tempranas hojas de almendro
que al soplo del aire tiemblan.

Es tu boca de rubíes
purpúrea granada abierta
que en el estío convida
a apagar la sed con ella,

Y sin embargo
sé que te quejas
porque tus ojos
crees que la afean,
pues no lo creas.

Que parecen, si enojada
tus pupilas centellean,
las olas del mar que rompen
en las cantábricas peñas.

Es tu frente que corona,
crespo el oro en ancha trenza,
nevada cumbre en que el día
su postrera luz refleja.

Y sin embargo
sé que te quejas
porque tus ojos
crees que la afean:
pues no lo creas.

Que entre las rubias pestañas,
junto a las sienes semejan
broches de esmeralda y oro
que un blanco armiño sujetan.

Porque son, niña, tus ojos
verdes como el mar te quejas;
quizás, si negros o azules
se tornasen, lo sintieras.


GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER, Rima XII

4 de noviembre de 2013

Fragmento en latín (desconocido)

Vina bibes iterum Tauro
diffusa palutris inter Minturnas

Beberás un vino cosechado durante el segundo
consulado de Tauro entre la pantosa Minturno


VALERIO MASSIMO MANFREDI, La última Legión

30 de octubre de 2013

The Summer Set

Boomerang
http://www.youtube.com/watch?v=3P07t59qCC4

Lightning in a Bottle
http://www.youtube.com/watch?v=MLgXl_6NIW0

Chelsea
http://www.youtube.com/watch?v=nEbOPaMyM_s

About a Girl
http://www.youtube.com/watch?v=SsGXaGcn4SI

Someone Like You
http://www.youtube.com/watch?v=-IkoVs3QtA0

Life Goes On
http://www.youtube.com/watch?v=OBRTB9bGGTs

Must be the Music
http://www.youtube.com/watch?v=k29e5yOfq8k

Don't let me go
http://www.youtube.com/watch?v=-Etl1szPoZk&list=PL87FEC1E50B3CCF61

Mona Lisa
http://www.youtube.com/watch?v=w6EXcn3Adb4

For more information:
http://thesummersetband.com/

Fragmento en latín

Veniet adulescens a mari infero cum spatha
pax et prosperitas cum illo,
aquila et draco iterum volabunt
Britanniae in terra lata.

Llegará un joven del mar meridional
con la espada trayendo paz y prosperidad.
El águila y el dragón volverán a volar
sobre la gran tierra de Britania.

VALERIO MASSIMO MANFREDI, La última Legión

¡Cantad oh todos!

¡Cantad ahora, oh gente de la Torre de Anor,
porque el Reino de Sauron ha sucumbido para siempre,
y la Torre Oscura ha sido derruida!

¡Cantad y regocijaos, oh gente de la Torre de Guardia,
pues no habéis vigilado en vano,
y la Puerta Negra ha sido destruida,
y vuestro Rey retornará,
y todos los días de vuestra vida
habitará entre nosotros.

Y el Árbol marchito volverá a florecer,
y él lo plantará en sitios elevados,
y bienaventurada será la Ciudad.
¡Cantad oh todos!


J.R.R TOLKIEN, El Señor de los Anillos (El retorno del rey)

19 de octubre de 2013

"Un corazón roto es más sabio que uno que nunca se ha roto"

Muchas veces en nuestra vida tenemos que enfrentarnos a retos que a lo mejor no queríamos superar. Pero lo hemos tenido que hacer porque si no, nos quedamos atrás. Y en esta vida hay que saber seguir adelante, hay que saber luchar por lo que queremos, hay que saber mirar hacia atrás para poder mejorar en el futuro. Todo esto es muy fácil de decir o de escribir, pero muy difícil de realizar. ¿Por qué? Porque tenemos que afrontar todas nuestras situaciones y para eso se necesita una fuerza de voluntad muy grande.

Desgraciadamente, las personas no nacen con esa virtud. Para tenerla, hay que ganársela y poder experimentar lo suficiente como para poder forjarla. Gracias a nuestros errores podemos mejorar nuestra manera de ser y de pensar. Porque de los errores se puede aprender mucho. En cambio, si vivimos una vida donde se nos da todo hecho, donde no tenemos que esforzarnos apenas, no llegaremos muy lejos.

Desde siempre el ser humano ha aprendido a caminar, a manejar el fuego, a crear materiales resistentes, a domar a los animales, a saber pensar, a estudiar las cosas, a componer las mejores melodías, a observar las estrellas, a mejorar en las tecnologías, a saber vivir mejor... Y gracias a esas mejoras ahora somos lo que somos. Sin embargo, a pesar de nuestra avanzada vida, la Humanidad aún tiene que aprender muchísimo. En todos los aspectos. Aunque parezca extraño, la raza humana ha vivido muy poco en comparación a la edad de nuestro planeta.

Tampoco hay que olvidar los fallos que hemos provocado nosotros, tanto moralmente como físicamente, tanto a nosotros mismos como al planeta donde vivimos. Dañamos, golpeamos, herimos, insultamos, rompemos, cortamos, destruimos... Pero también somos capaces de crear cosas maravillosas (aspecto ya mencionado). Con lo cuál, nosotros, ¿qué somos exactamente? ¿Una raza que extermina pero crea a la misma vez? No lo sabemos con seguridad. Pero lo que sí hay que tener en cuenta es que, si algún día una de las dos partes de la balanza fallase estaríamos perdidos. Si sólo supiésemos crear cosas sin destruirlas, jamás aprenderíamos a valorarlas. Si sólo fuésemos capaces de destruir, este mundo sería muy parecido al infierno mismo.

Así que lo mejor que podemos hacer es mantener una mente abierta, sin alterar nuestra personalidad y aprender de todo lo que nos encontremos en nuestra vida. Porque si no lo hacemos, seremos siempre unas personas sin saber. sin conocimiento. Y eso, lectores y lectoras, no nos diferencia mucho de los vulgares animales. Porque los humanos se diferencias de las demás criaturas por su capacidad de pensar y por su cultura. Por eso, manteneos siempre atentos a cada cosa que se os presente. Y nunca os vayáis a la cama sin haber aprendido algo nuevo, por muy pequeño que sea. Pues dicen, que las cosas insignificantes son las más importantes.


Escrito por el autor/a de este blog.

11 de octubre de 2013

Hipster










Historia del metro

Érase una vez un sencillo hombre que se encontraba en el metro para empezar su rutina diaria. Era alto, delgado y llevaba traje con una corbata, acorde a su trabajo. Estaba esperando en el andén cuando de repente, una hermosa mujer con falda y zapatos de tacón, se colocó cerca de él, esperando también al tren. Iba completamente vestida de negro y muy elegante, al parecer, también se dirigía a su trabajo.

Cuando ya empezaron a oír el traqueteo de las ruedas con los raíles, a la mujer se le cayó uno de los papeles que llevaba sujeto al brazo. Éste, sin dudar, se apresuró a cogerlo y dárselo. Fue entonces cuando ella reparó en él. Le pareció guapo y simpático. Él pensó que tenía unos ojos castaños brillantes y una sonrisa perfecta. Ella le dio las gracias y entonces empezaron a charlar como si nada. 

Llegó el tren y los dos siguieron hablando y bromeando. Pero cuando la mujer llegó a su destino se tuvo que despedir de él, cosa que le entristeció en parte. Se quedó solo y pensando cómo podría hacer para volver a hablar con ella. Más tarde el tren se detuvo en su parada. Con hombros encogidos, salió y entró al altísimo edificio de negocios. Se sentó en su sitio y empezó a ordenar papeles. A pesar de todo, se sentía distante, como si su cuerpo y su mente no estuviesen allí. En una de estas ocasiones, miró distraído a la ventana y se llevó una sorpresa. ¡En el edificio de enfrente se encontraba la amable mujer con la que había estado hablando en el metro! Tenía que llamar su atención de alguna manera, así que rápidamente cogió un folio e hizo unos cuantos pliegues hasta que consiguió hacer un avión de papel. Lo lanzó por la ventana, pero una corriente de aire lo desvió. Aún esperanzado hizo otro avión y lo volvió a tirar. Pero se fue hacia otra dirección. No se rindió y así siguió hasta que ya no le quedaron folios que tirar. De repente vino el jefe y le obligó a irse del trabajo, pues estaba malgastando su tiempo y los papeles. Desilusionado, salió a la calle donde se sentó en un banco.

Más allá de donde se encontraba, la señora estaba terminando de llamar a un cliente cuando salió a la calle. Caminaba despreocupada observando lo que le rodeaba cuando de pronto, vio un pequeño avión de papel. Curiosa, lo siguió tratando de capturarlo sin éxito. Parecía como si tuviera vida propia, como si quisiera decirle algo, como si quisiera conducirle a alguna parte. Continuó andando detrás del trozo de papel hasta que llegó a una fuente. No muy lejos, el hombre miraba al suelo cuando reparó en el avión de papel que él mismo había hecho. Sin poder creerlo, vio como este, poco a poco, alzaba el vuelo hasta quedar casi suspendido en el aire. De repente, se echó a volar. Sin dudarlo lo siguió hasta que llegó a una fuente y se cayó muerto en el suelo de cemento. Al agacharse vio enfrente suyo a una señorita que lo miraba sonriente. Enseguida los dos se reconocieron y volvieron a saludarse.

Y así termina la historia, con una pareja que casualmente se conoció en el metro y desde entonces no quieren separarse.

FIN


Escrito por el autor/a de este blog.

El equilibrio del mundo

El mundo ha sido siempre así desde la aparición de la vida. Las criaturas nacen y mueren. Ninguna criatura puede sobrevivir sin alimentarse de otra, directa o indirectamente. Para que las criaturas existan, otras tienen que morir. Nosotros estamos en el mundo para que las criaturas vivan. Los demonios están en el mundo para que las criaturas mueran. Si los ángeles no existiésemos, nuestro planeta acabaría por convertirse en un mundo muerto. Si los demonios no existiésen, las criaturas crecerían y se reproducirían sin control, y el planeta no podría sustentarlas a todas. Somos los dos extremos de la balanza. La existencia de unos y otros garantiza el equilibrio del mundo.

LAURA GALLEGO GARCÍA, Dos velas para el diablo

El Trino del Diablo

Tras comprobar la tensión del cordaje y la largura del arco, se colocó el violín en posición y emitió unas leves notas. El instrumento estaba perfectamente afinado.
Miró a los ojos del anciano que parecía estar escrutándolo y comenzó a tocar con la maestría que le era inherente, como si le poseyera un don especial en sus manos.

La vivaz música invadió apasionadamente la estancia con un frenesí desbocado, pero con una armonía y una ejecución tan perfectas como nunca había escuchado el maestro Di Lorenzo.
Fueron unos minutos maravillosos en los que el violín pareció cobrar vida propia por la destreza de aquellos huesudos dedos, que saltaban hábilmente de una cuerda a otra mientras el arco extraía de ellas un abanico de bellas notas extraordinariamente conjuntadas.

SANDRA ANDRÉS BELENGUER, El violín negro

El Fantasma de la Ópera

En aquella silla se hallaba depositados una rosa roja y un pequeño libro del mismo color.
Las lágrimas de Christelle no borraron su sonrisa.
Ante sí tenía la prueba de que aquella noche él había estado allí, siendo testigo de la culminación de su gran obra, contemplando el triunfo final de una vida marcada por el dolor y el rechazo. Se le había condenado desde que nació, y sin embargo, había perdonado a la humanidad regalándole lo más preciado para él: su música.

SANDRA ANDRÉS BELENGUER, El violín negro